"El grado de civilización y cultura de un pueblo se puede medir en las vibraciones e inquietudes de sus hijos por estudiar y conocer su historia"
Tito Sierra Santamaría

jueves, 25 de marzo de 2010

JUAN JOSÉ RONDÓN DELGADILLO VS. SCHETTINO

Manuel Soto Arbeláez

Los 14 valientes que acompañaron al coronel Juan José Rondón Delgadillo en el combate de Pantano de Vargas, 15 con él, fueron: 1. Coronel Juan José Rondón. 2. Capitán Julián Mellado, su compadre. Epónimo del Municipio que lleva su nombre. Capital El Sombrero. 3. Capitán Valentín García, cumanés, llamado popularmente Martín Valiente. 4. Capitán Miguel Lara. 5. Capitán Domingo Mirabal. 6. Capitán Celedonio Sánchez. 7. Teniente José de la Cruz Paredes. 8. Teniente Pablo Matute, natural de Guardatinajas, siendo su verdadero nombre Domingo López Matute. Este patriota protagonizó un acto novelesco, cuando estando con 173 lanceros llaneros venezolanos como él se le alzó en Bolivia al Gran Mariscal Sucre, y fue a tener a La Argentina, donde tomó por asalto a la ciudad de Salta, deponiendo al general Álvarez de Arenales y haciéndose fuerte allí. Pero esa es una historia muy larga que contaré en otra ocasión. 9. Teniente Pedro Lancheros. 10. Teniente Rozo Sánchez. 11. Teniente Bonifacio Gutiérrez Zambrano. 12. Subteniente Saturnino Gutiérrez Daza. 13. Subteniente Miguel Segovia. 14. Subteniente Pablo Segovia. 15. Sargento Inocencio Chincá, este era neo granadino, de Casanare. En Colombia se le han hecho homenajes a Rondón. Existe un municipio que lleva su nombre en Arauca. Hay un colegio militar del cual es epónimo, barrios en diferentes ciudades llevan su nombre y, es más, también tiene un himno en su honor. Me dice la licenciada Socorro Armas, historiadora natural de Zaraza, que ella visitó en Colombia todos los lugares donde peleó Rondón, quedando impresionada por los monumentos que se han erigido en honor a estos héroes de la independencia. Estas son sus palabras: “Estimado amigo: aunque tarde hoy 03-03, estando en Montreal, Canadá, abrí su artículo sobre el héroe del Pantano de Vargas J.J Rondón y me emocione mucho pues en un viaje que hice a Colombia hace ya algún tiempo, me fui con una amiga hasta la ciudad de Paipa (Departamento de Boyacá si no me equivoco), para visitar expresamente el monumento que le hiciera un colombiano hacia 1960. Dicho monumento es algo espectacular, lamentablemente no tenía cámara fotográfica, pero puedo describirlo y, me emociona el recordarlo. En una pequeña base de mármol se levanta una lanza disparada hacia el cielo, toda de bronce así como los gigantescos caballos y sus jinetes con arremetidas lanzas en posición de combate; es increíble como el escultor calculo el peso de tan voluminosa escultura. A un lado de la redoma en un recuadro de mármol o granito están registrados los nombres de Rondón y sus catorce llaneros: además están unos versos alusivos a la gesta. Los Segovia eran hermanos”(..).

Rondón era nativo del Distrito Infante. Por muchos años una de las principales calles de Valle de la Pascua se llamó Juan José Rondón, pero hubo un Concejo Municipal que se le ocurrió la idea de quitar el nombre del héroe a la dicha calle y le pusieron Schettino, un señor que era mecánico en los 1920s y 1930s, pero que no le calzaba los puntos al héroe. Evidentemente fue un desatino y un irrespeto a tan ilustre ciudadano.

EL PADRE CHACÍN

Argenis Ranuarez A.
Cronista del Municipio Juan Germán Roscio



Un trujillano sembrado hondo en el Guárico. Un montañés que amó entrañablemente al llano. Un sacerdote católico amante de la historia. Un investigador acucioso de orígenes y desarrollo de pueblos y ciudades. Un conversador locuaz, tentado por la incontinencia verbal, tentación finalmente rendida ante su proverbial capacidad de oyente.

Chacín fue todo un personaje, además de una gran persona y una recia personalidad. En esa ciudad que todo de pascua tiene y nada de Valle, conocimos a ese gigante de voz grave y ojos saltones, con él compartimos mesa cuadrada y cerveza sobre conversos y trago traído en tren, barco y avión desde la lejana Escocia.

Nada era suave con Chacín Soto. Si reía, era hasta tos con ahogo y si evocaba sus días de niño de la cordillera, de seminarista, de cura de pueblo, era a todo detalle, como fotografía, con película.

Con Chacín – con el padre Chacín, - podía uno pasar horas y más horas sin posibilidad de sueño, cansancio ni fastidio, si se desviaba, tras precisiones sobre el nuevo tema, retomaba, pedía disculpas, el tic nervioso de su cabeza aumentaba la frecuencia y entonces era cuando le entraba bueno y duro a sus argumentos. Era un gladiador armado de ideas, ideales, palabra en ristre, altivo sin altanerías, orgulloso, sin prepotencias. Era apasionado. Convencía porque estaba convencido.

No hay en la ciudad de la pascua obra educativa, social, deportiva o cultural, a la cual no este su nombre vinculado. Era nervios, pantalones y sotana bien puestos preguntaba con la palabra y con los ojos con la palabra y con las manos respondía. Leía y anotaba en los márgenes. Marcaba y remarcaba, escribía corregía y volvía a corregir mucho deben la historia de Altagracia de Orituco y la historia de su Valle de la Pascua a su búsqueda, a su hallazgo y a su pluma. Ataba cabos sueltos y desataba nudos sin romper el hilo de la historia.

Hace cien años nació ese maestro que declamaba versos de vida y de muerte y recitaba pasajes del ayer remoto como si los hubiera vivido.

Por Rafael Chacín Soto, por el hombre, por el sacerdote, por el cronista, por el historiador, este tinto jerezano y este cohiba de Cuba – que no me cohibo – para recordarlo de cuerpo y de presencia entera, en toda la grandeza de la figura y de su genio, que fueron uno solo, hasta la sepultura.

lunes, 22 de marzo de 2010

JOSÉ ÁNGEL ADAMES

Carlos A. López Garcés

Cronista de Altagracia de Orituco

Municipio José Tadeo Monagas

Estado Guárico


Nació en Altagracia de Orituco, el 31 de marzo de 1897, a las nueve de la mañana. Hijo natural de Celestina Adames y del general Adolfo Chataing(1). Tuvo cuatro hermanos: Eudoro, Felipe, Carmen y Petra(2). Estudió en el seminario de Calabozo con la aspiración de hacerse cura, lo que no pudo lograr porque la Iglesia Católica no ordenaba como sacerdotes a hijos naturales, de padres casados con otra mujer(3). Conservó en silencio los motivos de su frustración sacerdotal y afirmó alguna vez que ‘él no podía enmendarle la plana a Dios’(4); sin embargo, se mantuvo como practicante del catolicismo. Preservó su soltería(5).

El Maestro José Ángel, que fue el nombre adoptado por la comunidad para identificar a este educador orituqueño, se caracterizaba por ser temperamental, de mediana estatura, gordo, piel blanca, cara redonda y rojiza, calvo, pelo liso, vestir pulcro, cordial, cortés, buenos modales, sin vicios (abstemio y no fumaba), hablar pausado, sedentario y andar lento; portaba comúnmente una vera encabuyada debajo del brazo; en cierta ocasión especial dijo de sí mismo: “En cuanto a mi persona debo confesar que he sido un poco excéntrico, que nunca he solicitado nada a nadie, temeroso de caer envuelto en la cobarde hipocresía con que se nos trata hoy, nunca he doblegado la frente si no ante Dios, huyendo de ese abyecto servilismo que degrada los hombres, nunca he confiado en los elogios, porque los que por alguna circunstancia suelen decirnos buenos, mañana pueden cambiarnos el adjetivo, decirnos malos o como se les antoje, por eso he respetado siempre mi yo interior, y en ese nivel, y bajo esa conducta he sostenido mis nobles principios”.(6)

JOSÉ ÁNGEL ADAMES (1897 – 1974)

Fuente: Equis. Director: José Melchor González. Año V – Mes I –

Nº 16. Altagracia de Orituco, diciembre de 1967, p. 1.

La frustración de la carrera de sacerdote del maestro José Ángel fue una especie de suerte para Altagracia, porque pudo contar con sus servicios al momento de requerirlos, “incluso en la hora de los discursos de efemérides y de las horas luctuosas”, que fueron sus mejores piezas literarias para tales momentos, según artículo firmado por el médico y escritor gracitano Rodrigo Infante Marrero, en Caracas, en 1975(7).

Practicó el autodidactismo con preferencia por la literatura clásica. Ejerció la docencia en la Escuela Federal Ángel Moreno de Altagracia de Orituco, donde laboró como maestro de segundo a quinto grado en el transcurso de varios años(8). Su genio temperamental lo indujo a retirarse de cargos docentes gubernamentales; optó por dedicarse al cultivo de la tierra en el sitio El Peñón, cerca de Altagracia(9). Regresó al trabajo educativo, para lo cual fundó y mantuvo una escuela privada de educación primaria en su pueblo natal, de donde egresaron estudiantes que después se distinguieron profesionalmente, como fue el caso, por ejemplo, de Pedro Durant, meritorio profesor de la Universidad de los Andes y conferencista internacional de temas ecológicos(10). Impartía sus conocimientos con metódica disciplina e inculcaba rigurosamente el sentido de la responsabilidad a sus alumnos, para lo cual aplicaba palmetazos cuando lo consideraba indispensable.

Se aferró contradictoriamente a una ideología política reaccionaria. A pesar de su origen humilde, no compartía la tesis de aquellas organizaciones que procuraban ampliar la participación popular en las decisiones gubernamentales, fuesen éstas reformistas o revolucionarias, pues no justificaba la existencia de un partido del pueblo. Fue adversario de Acción Democrática y anticomunista consumado(11).

Colaboraba como articulista de periódicos locales altagracianos y de otras comunidades guariqueñas; son ejemplos de esta actividad los escritos “A la memoria de Soledad de D’Suze” y “Vida y obra del doctor Pedro María Arévalo Cedeño”, publicados en Equis, medio impreso gracitano dirigido por José Melchor González; además, un artículo juicioso sobre el reputado músico orituquense José Calixto Morín, hecho público a través de El Trabajo, en diciembre de 1930 (12).

Tuvo vocación de orador; pronunció inspirados discursos en diversos actos organizados por razones especiales. Entre sus piezas oratorias resaltan: la leída con motivo de la inauguración de la Casa de la Cultura en San Rafael de Orituco, programada como una de las actividades del reencuentro de orituquenses, efectuada el 3 de diciembre de 1967; la oración fúnebre sobre el maestro y poeta Próspero Infante, expuesta en el Cementerio General de Altagracia de Orituco, en 1968, en ocasión del enterramiento de ese distinguido intelectual ipireño; las palabras dichas en el homenaje de la Junta Comunal de Lezama al poeta, periodista y educador Jesús Bandres, en marzo de 1969. Las tres fueron publicadas en el periódico Equis, antes mencionado(13).

No ocultó su afinidad por el cultivo de la poesía; ejemplos de esta actividad intelectual son los poemas: Versos inéditos (dedicados al maestro y poeta Próspero Infante), Tras una estrella, La industria, A la Virgen de los Dolores, A mi madre, Mujer de cabaret: mujer de lupanar, Un llanero, que fueron dados a conocer por el vocero Equis(14). Al decir del médico y escritor gracitano Rodrigo Infante Marrero “…sus versos eran cojos, sin el toque sutil que califica; carentes de ese ingenio que algunos llaman talento, sin ese don de husmear el futuro que es el vaticinio. Sin embargo, sus conterráneos estimulábamos su producción literaria porque sabíamos que en la hora del balance, su multiplicación generosa, su honestidad, su sinceridad y en general su hombría de bien, iban a dar un resultado francamente positivo…”(15)

Fue autor de una breve Biografía de monseñor Felipe Neri Sendrea(16). Recibió la condecoración El Sol de Orituco, impuesta por el Comité Pro-vuelta a Orituco en la oportunidad del reencuentro de orituqueños, el 3 de diciembre de 1967(17). Justo es comentar que entre los reconocimientos recibidos por el maestro José Ángel Adames estuvo el de haber sido epónimo de una biblioteca pública promovida por el Comité de Damas del Club de Leones de Altagracia de Orituco; lamentablemente, la obra quedó reducida a su instalación e inauguración en la sede de la Casa del Maestro, ubicada en la calle Rondón de la localidad gracitana, el 19 de junio de 1971, cuando el Concejo Municipal del otrora Distrito Monagas del Estado Guárico, asumió el encargo de su funcionamiento y expansión, aunque este órgano jamás cumplió tal compromiso y la obra no pasó de allí(18).

Dos criminales que fueron identificados como José Manuel Hernández (alias El Zurdo) y Carlos Orasma, el domingo 3 de noviembre de 1974, a las nueve de la noche (09:00 p.m.), aproximadamente, asaltaron al viejo y noble educador en su residencia de Altagracia de Orituco, donde vivía solo y aun tenía su escuela de enseñanza primaria, ubicada en la calle José Martí, entre la Santiago Gil y la Gil Pulido; lo golpearon fuertemente con un trozo de concreto, lo amordazaron, le ataron los pies y las manos y le robaron cinco mil bolívares(19). El maestro José Ángel Adames falleció el 4 de noviembre de 1974, a las tres de la madrugada, como consecuencia de amordazamiento constrictivo de la boca a la región cervical, hundimiento del frontal y hemorragia interna, según certificado médico expedido por el doctor Delmiro López Sánchez (20). Contaba setenta y siete años de edad. Fue un asesinato con crueldad y ensañamiento, que causó consternación en la comunidad orituqueña. Está enterrado en el Cementerio General de Altagracia de Orituco.


REFERENCIAS

(1) R.C.M.J.T.M.E.G.: Partida de nacimiento de José Ángel Adames Libro de Registro de Nacimientos del Municipio Altagracia de Orituco, Distrito Monagas del Estado Guárico. Año 1897. Tomo Nº I. Folio 54 fte. Acta Nº 107.

Observaciones: 1.- La tumba de Adolfo Chataing, en el Cementerio General de Altagracia de Orituco, está identificada con una inscripción lapidaria que dice textualmente: “Adolfo Chataing, 1950 / Recuerdo / J.A. Adames / Carmen Arias”. Esta lápida habría sido colocada por José Ángel Adames y su hermana Carmen Adames de Arias, lo que refuerza una información pública según la cual ambos eran hijos de aquel general. 2.- Adolfo Chataing era esposo de Rosana Pérez de Chataing (Leer: ORTEGA PEREZ, Clemente. Memorias de un gracitano. Caracas. Impresos Minipres, C.A., primera edición, 2005, p. 20).

(2) D’SUZE: Conversación. Altagracia de Orituco, jueves 11 de marzo de 2010. SOSA: Coversación. Altagracia de Orituco, miércoles 10 de marzo de 2010.

(3) INFANTE: Conversación. Botalón (San Rafael de Orituco), sábado 20 de febrero de 2010.

(4) BANDRES: Equis. Mes 3 – Nº 55. Altagracia de Orituco, 6 de enero de 1975, p. 1.

(5) IBIDEM: Equis. Año XIV – Mes VI – Nº 74. Altagracia de Orituco, abril de 1977, p. 7. R.C.M.J.T.M.E.G.: Partida de defunción de José Ángel Adames. Libro de Registro de Defunciones del Municipio Altagracia de Orituco, Distrito Monagas del Estado Guárico. Año 1974. Tomo Nº I. Folio Nº 130 vto. Acta Nº 260.

(6) Equis. Año V – Mes I – Nº 16. Altagracia de Orituco, diciembre de 1967, p. 1.

(7) IBIDEM: Año XIV – Mes VI – Nº 74. Altagracia de Orituco, abril de 1977, p. 7.

(8) INFANTE: Valores de Orituco, literatura I, 2003. IBIDEM: op. cit., 1999, p. 8. MARTÍNEZ: Topano. Año I – Nº 5. Altagracia de Orituco, septiembre de 1964, p. 2. IBIDEM: Topano. Año II – Nº 13. Altagracia de Orituco, diciembre de 1965, p. 2. IBIDEM: Topano. Año II - Nº 23. Altagracia de Orituco, noviembre de 1967; p. 4. RUBÍN ZAMORA: Lorenzo. Diccionario biográfico cultural del estado Guárico, 1974, pp. 22 y 23.

(9) BANDRES: Equis. Mes 3 – Nº 55. Altagracia de Orituco, 6 de enero de 1975, p. 4. INFANTE: Equis. Año XIV – Mes VI – Nº 74. Altagracia de Orituco, abril de 1977, p. 7.

(10) INFANTE: Conversación citada. IBIDEM: op. cit., 2003. IBIDEM: op. cit., 1999, p. 8. RUBÍN ZAMORA: op. cit., pp. 22 y 23.

(11) INFANTE: Equis. Año XIV – Mes VI – Nº 74. Altagracia de Orituco, abril de 1977, p. 7.

(12) Equis: Año VI – Mes 5 - Nº 20. Altagracia de Orituco, marzo de 1969, p. 5. IBIDEM: Año VII – Nº 26. Altagracia de Orituco, 2ª quincena de julio y 1ª de agosto de 1970, p. 4. El Trabajo. Año VI-Mes IX-Nº 139. 11. Altagracia de Orituco, 27 de diciembre de 1930, p. 11.

(13) Equis: Año V – Mes I – Nº 16. Altagracia de Orituco, diciembre de 1967, p. 1. IBÍDEM: Año VI – Mes I – Nº 19. Altagracia de Orituco, noviembre de 1968, pp. 3 y 4. IBÍDEM: Año VI – Mes 5 – Nº 20. Altagracia de Orituco, marzo de 1969, pp. 3 y 10.

(14) Equis. Año VI – Mes I – Nº 19. Altagracia de Orituco, noviembre de 1968, p. 5. IBIDEM: Año VI – Mes 5 – Nº 20. Altagracia de Orituco, marzo de 1969, p. 9. IBIDEM: Año VI – Mes 9 – Nº 21. Altagracia de Orituco, 1ª quincena de agosto de 1969, p. 4. IBIDEM: Año VII – Mes 2 – Nº 23. Altagracia de Orituco, diciembre de 1969, p. 5. IBIDEM: Año X – Mes 8 – Nº 44. Altagracia de Orituco, 15 de junio de 1973, p. 5. IBIDEM: Año XI – Mes 4 – Nº 48. Altagracia de Orituco, 9 de febrero de 1974, p. 2. IBIDEM: Año XI – Mes 7 – Nº 52. Altagracia de Orituco, 24 de mayo de 1974, p. 3.

(15) Equis. Año XIV – Mes VI – Nº 74. Altagracia de Orituco, abril de 1977, p. 7.

(16) INFANTE: op. cit., 2003. IBIDEM: op. cit., 1999, p. 8. RUBÍN ZAMORA: op. cit., p. 23.

(17) RUBÍN ZAMORA: op. cit., p. 23.

(18) Equis. Año VIII – Nº 36. Altagracia de Orituco, 30 de junio de 1971, p. 8.

(19) Equis. Mes 3 – Nº 55. Altagracia de Orituco, 6 de enero de 1975, p. 6.

(20) R.C.M.J.T.M.E.G.: Partida de defunción de José Ángel Adames. Libro de Registro de Defunciones del Municipio Altagracia de Orituco, Distrito Monagas del Estado Guárico. Año 1974. Tomo Nº I. Folio Nº 130 vto. Acta Nº 260.


FUENTES


I.- Documentales

REGISTRO CIVIL DEL MUNICIPIO JOSÉ TADEO MONAGAS DEL ESTADO GUÁRICO (R.C.M.J.T.M.E.G.). Altagracia de Orituco.

- Partida de nacimiento de José Ángel Adames. Libro de Registro de Nacimientos del Municipio Altagracia de Orituco, Distrito Monagas del Estado Guárico. Año 1897. Tomo Nº I. Folio 54 fte. Acta Nº 107.

- Partida de defunción de José Ángel Adames. Libro de Registro de Defunciones del Municipio Altagracia de Orituco, Distrito Monagas del Estado Guárico. Año 1974. Tomo Nº I. Folio Nº 130 vto. Acta Nº 260.

II.- Bibliográficas

INFANTE, Rodrigo. Valores de Orituco, literatura I. Altagracia de Orituco. Fundación Dr. Pedro María Arévalo Cedeño, 2003.

INFANTE, Rodrigo. Valores de Orituco, literatura I. Altagracia de Orituco. Edición artesanal del autor, 1999.

RUBÍN ZAMORA, Lorenzo. Diccionario biográfico cultural del estado Guárico. Caracas. Edición del autor. Impreso en Gráficas Herpa, 1974.

TORREALBA LOSSI, Mario. Memorias de Pacífico Sereno. San Juan de los Morros. Editado por la Fundación Guariqueña para la Cultura (FUNDACULGUA), Biblioteca de temas y autores guariqueños, serie: narrativa, historia y testimonios, 1989, p. 25.

III. Hemerográficas

ADAMES, J.A. “A la memoria de Soledad de D’Suze”. Equis. Director: José Melchor González. Año VI – Mes 5 - Nº 20. Altagracia de Orituco, marzo de 1969, p. 5.

ADAMES, J.A. “A la Virgen de los Dolores”. Equis. Director: José Melchor González. Año X – Mes 8 – Nº 44. Altagracia de Orituco, 15 de junio de 1973, p. 5.

ADAMES, J.A. “A mi madre”. Equis. Director: José Melchor González. Año X – Mes 8 – Nº 44. Altagracia de Orituco, 15 de junio de 1973, p. 5.

ADAMES, J.A. “José Calixto Morín”. El Trabajo. Director: J.A. Hurtado Ascanio. Año VI-Mes IX-Nº 139. 11. Altagracia de Orituco, 27 de diciembre de 1930, p. 11.

ADAMES, J.A. “La indstria”. Equis. Director: José Melchor González. Año VI – Mes 9 – Nº 21. Altagracia de Orituco, 1ª quincena de agosto de 1969, p. 4. IBIDEM: Año VII – Mes 2 – Nº 23. Altagracia de Orituco, diciembre de 1969, p. 5.

ADAMES, J.A. “Mujer de cabaret: mujer de lupanar”. Equis. Director: José Melchor González. Año XI – Mes 4 – Nº 48. Altagracia de Orituco, 9 de febrero de 1974, p. 2.

ADAMES, J.A. “Próspero Infante: poeta y maestro”. Equis. Director: José Melchor González. Año VI – Mes I – Nº 19. Altagracia de Orituco, noviembre de 1968, pp. 3 y 4.

ADAMES, J.A.. “Tras una estrella”. Página poética. Equis. Director: José Melchor González. Año VI – Mes 5 – Nº 20. Altagracia de Orituco, marzo de 1969, p. 9.

ADAMES, J.A. “Un llanero”. Equis. Director: José Melchor González. Año XI – Mes 7 – Nº 52. Altagracia de Orituco, 24 de mayo de 1974, p. 3.

ADAMES, J.A. “Versos inéditos”. Página poética. Equis. Año VI – Mes I – Nº 19. Director: José Melchor González. Altagracia de Orituco, noviembre de 1968, p. 5.

ADAMES, J.A. “Vida y obra del doctor Pedro María Arévalo Cedeño”. Equis. Director: José Melchor González. Año VII – Nº 26. Altagracia de Orituco, 2ª quincena de julio y 1ª de agosto de 1970, p. 4.

BANDRES, Jesús. “Nuestro Primer encuentro con José Ángel Adames”. Equis. Mes 3 – Nº 55. Director: José Melchor González. Altagracia de Orituco, 6 de enero de 1975, p. 1 y 4.

“Inaugurada biblioteca pública José Ángel Adames”. Equis. Director: José Melchor González. Año VIII – Nº 36. Altagracia de Orituco, 30 de junio de 1971, p. 8.

INFANTE, Rodrigo. “El maestro José Ángel”. Equis. Director: José Melchor González. Año XIV – Mes VI – Nº 74. Altagracia de Orituco, abril de 1977, 7.

La muerte de un maestro”. Equis. Mes 3 – Nº 55. Director: José Melchor González. Altagracia de Orituco, 6 de enero de 1975, p. 1 y 4.

MARTÍNEZ, José Francisco. “Historia de la Escuela Ángel Moreno”. Topano. Responsables: José Francisco Martínez y Luis Emilio Infante. Año II - Nº 23. Altagracia de Orituco, noviembre de 1967; p. 4.

MARTÍNEZ, José Francisco. “Homenaje póstumo al doctor Rubén Hurtado Rodríguez”. Topano. Responsables: José Francisco Martínez y Luis Emilio Infante. Año II - Nº 13. Altagracia de Orituco, diciembre de 1965; p. 1.

MARTÍNEZ, José Francisco. “Llegada de Próspero Infante a Altagracia. Creación de la Escuela Ángel Moreno”. Topano. Responsables: José Francisco Martínez y Luis Emilio Infante. Año I - Nº 5. Altagracia de Orituco, septiembre de 1964; p. 2.

Palabras de José Á. Adames en la inauguración de la Casa de la Cultura en San Rafael de Onoto [léase: Orituco]”. Equis. Director: José Melchor González. Año V – Mes I – Nº 16. Altagracia de Orituco, diciembre de 1967, p. 1.

Palabras de José Ángel Adames en el Homenaje del Concejo Municipal del Distrito Monagas del Estado Guárico al doctor Agustín Gutiérrez Carchidio. Equis. Director: José Melchor González. Año VII – Mes 2 – Nº 23. Altagracia de Orituco, diciembre de 1969, p. 1.

Palabras de José Ángel Adames en el Homenaje de la Junta Comunal del Municipio Lezama al poeta y periodista don Jesús Bandres”. Equis. Director: José Melchor González. Año VI – Mes 5 – Nº 20. Altagracia de Orituco, marzo de1969, pp. 3 y 10.

IV.- Información oral

Conversación con:

D’SUZE, Luis. Altagracia de Orituco, jueves 11 de marzo de 2010.

INFANTE, Rodrigo. Botalón (San Rafael de Orituco), sábado 20 de febrero de 2010.

SOSA, Ramón. Altagracia de Orituco, miércoles 10 de marzo de , 2010.